Septiembre llega, y con él la vuelta a la rutina, al menos para la mayor parte de la gente. Vuelta a la rutina, al trabajo, al cole y como no podía ser de otra forma, vuelta al kendo. Esto último para aquellos que se hayan tomado unas vacaciones de sus entrenamientos, pues sé de algunos que no han parado de darlo todo durante el mes de agosto a pesar de las altas temperaturas.

En mi opinión, este mes de Septiembre es un mes bueno para la práctica del kendo. Nos permite retomar el contacto con nuestros compañeros y volver a entrenar de nuevo con renovadas energías y pasión. También es un momento trascendental para muchas personas aunque ellas aún no lo saben.

Durante este mes muchos empezarán su andadura en el kendo, cada uno con sus motivos, los cuales pueden ser incluso desconocidos para ellos mismos. Aquellos que empiecen ahora puede que se transformen en gente importante para nosotros, grandes compañeros o incluso puede que lleguen a ser kendokas ilustres, quién sabe. Otros tantos lo dejarán por el camino, ya que no se encontrarán con aquello que buscaban, o simplemente no estarán hechos para el kendo. Pero en ningún caso, seamos los “veteranos” los que desanimemos a los recién llegados. Así que, ¡muchísimo ánimo a los nuevos!

Por otro lado, tenemos a finales de mes una cita ineludible en Vitoria, un curso al que ya estoy deseando asistir y al que animo a todos los que puedan dejarse caer por allí, que lo haga, ya que merece la pena.

En cuanto a los contenidos del blog para este mes, alguna cosilla interesante tendré preparada. Quizá lo más reseñable sea la crónica del seminario del último fin de semana de Agosto en Zaratán, Valladolid. Ha sido una experiencia totalmente recomendable, con muchas horas de kendo, unas instalaciones excelentes y un ambiente de lujo. Pero no quiero adelantar acontecimientos, ya os contaré.

Feliz vuelta al cole. ¡Feliz vuelta al kendo!

Fotografía | Jorge Rubio